Ya queda poco para las vacaciones de verano, una de las mejores épocas para los niños pero también una de las que produce mayores quebraderos de cabeza a los padres ya que, compaginar el cuidado de los niños con el trabajo, no siempre es fácil. Y más cuando se trata de tres meses en los que a los peques les puede dar tiempo a todo.
Además de pasar tiempo en familia, puede ser la ocasión perfecta para reforzar un idioma, practicar un deporte o probar con alguna actividad diferente.
Las soluciones son variadas y depende mucho de:
- Los objetivos de los papás: si quieres que aprendan idiomas, alguna actividad o simplemente descanse y disfruten.
- El tiempo que se necesite compaginar el cuidado del hogar y de los niños con el trabajo: si necesitas ayuda sólo por la mañana, si quieres que pernocte alguna noche o prefieres que conozca otro idioma y otra cultura fuera del país.
- La situación económica: siempre imprescindible pensar en el presupuesto del que disponeos para buscar lo que necesitamos y más nos gusta.
Te damos algunas opciones por si estás buscando ideas de qué hacer con tus hijos durante los días de verano.
Los abuelos
Contar con la ayuda de los abuelos es una opción estupenda, la que proporciona mayor confianza y la más económica.
Aunque tanto nietos como abuelos suelen estar deseando que lleguen estos días para convivir, lo cierto es que hay que ser conscientes de la situación de los mayores y no saturarles.
Es una muy buena solución mientras todos puedan y una buena alternativa es compaginarla con alguna de las opciones siguientes.
Campamentos de verano
Esta opción es muy útil, ya que los niños realizan actividades diversas y los horarios son flexibles para ayudar a los papás a conciliar.
Hay campamentos que cuidan de los pequeños durante toda la jornada laboral de los papás y permanecen abiertos desde las 7.00 de la mañana hasta las 19.00. También puedes contratarlos media jornada, días sueltos, por semanas, quincenas y el mes completo.
Algunos incluso ofrecen la oportunidad de dormir fuera una noche o durante todo el campamento.
Hay campamentos de deporte, de idiomas, de aventura donde se combinan distintas actividades diversas con el aprendizaje.
Escuelas de verano
Algunos centros escolares y escuelas infantiles amplían durante verano su oferta formativa y permiten a los niños seguir asistiendo al cole con un horario más flexible y con actividades lúdicas.
Para los más pequeños, de 0-3, es una opción muy buena ya que no cambian su rutina, continúan con los mismos compañeros y educadores y disfrutan de actividades más divertidas y diferentes que durante el resto del año.
Niñera, au pair o canguro
Contratar a una persona ajena a la familia que se encargue del cuidado de los hijos puede ser muy acertada ya que suelen ser jóvenes cualificados con muchas ganas de trabajar con niños que permiten una amplia flexibilidad de horarios y la inversión suele ser menor que los campamentos y escuelas de verano.
Además los niños no tienen que madrugar para desplazarse a ningún centro y se pueden establecer actividades lúdicas para realizar con la cuidadora: excursiones, ir a la piscina, jugar en el parque, realizar alguna visita al museo, etc.
Tienes la opción de contratar a una niñera, au pair o canguro.
Aunque pueda parecer que se trata del mismo trabajo cada uno de ellos cuenta con matices importantes que debes tener en cuenta a la hora de contratar a la cuidadora de tus hijos.
Debes pensar si se trata de algo temporal para estos meses de verano o si ya quieres que se encargue de los niños más adelante.
La canguro es la que puede cuidar de los niños de forma esporádica y en momentos puntuales.
La au pair suele ser una trabajadora joven, también temporal y extranjera, que a cambio de alojamiento, manutención y una pequeña remuneración, se encarga del cuidado de los hijos. Ten en cuenta que vivirá con vosotros, así que debe disponer de su propia habitación y de tres comidas diarias. Además, su jornada laboral no puede superar las cinco horas diarias y sus tareas deben estar relacionadas con los niños, como su cuidado, aseo, alimentación, etc.
Las niñeras suelen ser cuidadoras cualificadas. La mayoría dispone de formación relacionada con la infancia y cuentan con experiencia. Es la mejor opción si quieres que siga trabajando después del verano, recogiendo a los niños del cole y ayudándoles con las tareas. Estos días puede ser un buen momento para un primer acercamiento de cara al resto del año.
Tiene un salario, un horario y unas tareas pactadas y si tienes más de un peque puede ser la opción más económica.
Si tienes más dudas sobre la diferencia entre estas tres clases de cuidadoras, puedes leer nuestro artículo donde detallamos cada uno de estos perfiles.
Y si te decides por una niñera profesional, en CasaLista te ofrecemos las claves para encontrar a la idónea.
Campamentos, escuelas, abuelos o cuidadoras, lo importante es encontrar el equilibrio entre vuestros horarios y su descanso diversión y buenos hábitos. ¡Feliz verano!