Durante las últimas décadas, las referencias de empleadores anteriores han constituido el principal elemento de valoración de una empleada de hogar. Hoy las cosas han cambiado, en el siglo XXI no sirven las costumbres decimonónicas que resultaron útiles en otro tipo de sociedad.
Actualmente, las referencias resultan algo anacrónico e inadecuado para el fin perseguido.
A pesar de que las referencias para empleadas de hogar se siguen usando como instrumento de evaluación de trabajadoras domésticas, por nuestra experiencia, hemos constatado que en la mayoría de los casos, el sistema no funciona. Es decir, no ayuda a los empleadores a evaluar correctamente a una candidata; pueden inducir a error y, además es un sistema peligroso por su dificultad para compatibilizarlo con el cumplimiento de la legislación española vigente.
En este artículo vamos a exponer, punto por punto, por qué la petición de referencias de empleadores anteriores, como se viene practicando, es un método de evaluación de empleadas de hogar con referencias de los empleadores es ineficaz, ilegal y, además injusto, ya que condiciona el futuro profesional de una trabajadora a una valoración subjetiva sobre su pasado.
¿POR QUÉ LAS REFERENCIAS DE EMPLEADORES NO SON ÚTILES?
Las referencias de trabajos anteriores en el servicio doméstico a veces son fiables y otras no. En ocasiones nos ayudan a contratar a una empleada de hogar adecuada pero otras nos llevan a rechazar buenas candidatas o aceptar a otras mediocres.
La fiabilidad de las referencias de empleadores de hogar es muy baja porque:
LAS REFERENCIAS SON ARBITRARIAS:
Cada empleador evalúa a su empleada de hogar en función de unos parámetros muy personales, como es natural, que para eso está en su casa.
Es posible, incluso, que su empleador anterior valorase a la trabajadora en función de parámetros poco ortodoxos y por eso ésta se hubiera marchado de la casa o hubiera sido despedida y esto, sin duda, afectaría, de algún modo, al informe de la misma.
No sabemos lo que esconde cada opinión sobre sus empleadas de hogar: bondad, caridad, odio, envidia, resentimiento, egoísmo, estupidez, sinceridad. No lo podremos saber nunca.
Si no se conoce al empleador con el que se va a hablar, su carácter, su momento vital, su personalidad, su veracidad, sus principios, etc., así como los hechos acaecidos durante el tiempo que la empleada estuvo trabajando en esa casa, ¿cómo valorar su opinión sobre su empleadas de hogar?, ¿por qué tendríamos que creerle?, mejor todavía, ¿por qué tendríamos que preguntarle?
LAS REFERENCIAS SON SUBJETIVAS:
Una trabajadora es buena para unos y no lo es para otros, siendo la misma persona. El juicio de otros no es su juicio; suele estar sesgado y, por tanto, no es fiable.
Los trabajos de empleada de hogar, como cualquier otro contrato laboral, normalmente finalizan por un despido o por una dimisión. En ninguno de estos dos supuestos el empleador, probablemente, va a dar unos informes objetivos de la trabajadora, por razones obvias.
Si la despiden serán malos y si se va ella, peores. Vean p.e. esta consulta que nos hice una empleadora; ilustra su malestar por la ida de su empleada de hogar interna…
Sería difícil la objetividad en las referencias de sus empeladas domésticas en cualquiera de los dos casos y sin objetividad no hay sinceridad y si los informes no son sinceros, no nos van a ayudar a tomar una decisión correcta.
Los gustos o preferencias de una familia no tienen por qué coincidir con los de otra. En cada familia se valoran cosas distintas. También lo son las exigencias y la forma de evaluar el trabajo, cada persona es diferente.
También las candidatas evalúan de diferente modo las ofertas de trabajo y por cada candidata que rechaza un trabajo, se puede encontrar otra para la que sería su trabajo ideal.
LAS REFERENCIAS SON CAMBIANTES:
Una empleada de hogar buscando trabajo puede repartir una docena de currículum diarios con sus referencias.
El sufrido antiguo empleador que recibe esas 12 llamadas, unas muy correctas y otras no tanto, por muy buena voluntad que tenga, no puede atender con el mismo entusiasmo la primera llamada que la vigesimocuarta.
Es relativamente frecuente que la valoración sobre las empeladas domésticas cambie y que un empleador que daba referencias buenas hace unos meses, ahora las da regulares o malas.
Incluso desde el punto de vista del receptor, las referencias parecen cambiar. Hemos tenido casos en los que unas mismas referencias eran evaluadas como positivas por un empleador y negativas por otro.
LAS REFERENCIAS PROVOCAN CONFLICTOS DE INTERESES:
La llamada para verificar las referencias de la empleada de hogar sirve, en primer lugar, para que el empleador consultado se entere de que su antigua trabajadora está otra vez buscando trabajo.
Es frecuente que la llamada despierte el interés en su antigua empleadora, ya sea para volver a contratarla o para recomendarla a un amigo o familiar, y por tanto que facilite unas referencias regulares o incluso malas.
Los intereses del antiguo empleador y los del potencial nuevo empleador no suelen coincidir.
LAS REFERENCIAS SON MANIPULABLES:
De igual forma un empleador que despide a una trabajadora, descontento con su desempeño, puede acordar con ella que le dará excelentes referencias para ayudarla a encontrar otro empleo y evitarse así posibles complicaciones con un despido (El “puente de plata” como lo define Miguel de Cervantes)
Esto es frecuente, por ejemplo, en el caso de trabajadoras que se quedan embarazadas, o que se echan un novio que, por amor, por conflictos, por mil motivos, provoca que baje su desempeño laboral. (La “patata caliente”- El diccionario de la Real Academia Española (RAE) recoge la expresión patata caliente como un problema grave e incómodo de solución difícil)
No es frecuente, pero sí ha sucedido que una trabajadora se prepare unas referencias excelentes pero falsas, con la simple ayuda de una amiga que no tenga acento extranjero.
El excesivo peso que otorgan los empleadores a las referencias de trabajos anteriores provoca que sean más susceptibles a ser engañados o manipulados.
LAS REFERENCIAS SIEMPRE ESTÁN OBSOLETAS:
Las referencias siempre se refieren al pasado. La candidata a empleada de hogar ya no es la misma persona que era cuando desempeñaba sus trabajos anteriores.
Un informe anterior tendría escasa utilidad porque el futuro trabajo también sería diferente y la trabajadora se comportaría de diferente manera.
Por otra parte, cada persona reacciona y se comporta de modo diferente según donde trabaje, por varias razones:
- La influencia que ejerce el propio entorno dentro de la casa
- La influencia del entorno exterior (vecinos, acceso, localización)
- La relación con los miembros de la familia
- Las diferentes condiciones de trabajo
- Otras personas, otras tareas, otras circunstancias, etc.
Cuando las cosas cambian, cambian las cosas. Ya no vale lo anterior.
¿POR QUÉ LAS REFERENCIAS SON PELIGROSAS?
El mal uso de las referencias de los empleadores de hogar puede llevarnos a cometer un delito contra la LOPD (Ley Orgánica de Protección de Datos – BOE) y la propia Constitución Española que recoge el derecho a la intimidad como uno de los derechos fundamentales, otorgándole una protección especial.
LAS REFERENCIAS SON ILEGALES:
Las referencias son contrarias a los ordenamientos jurídicos de todos los países desarrollados.
En España el Derecho al Honor, y a la intimidad personal se regula en el artículo 18.1 de la Constitución, desarrollado por la L.O. 1/1982 de 15 de mayo, que califica estos derechos como irrenunciables, inalienables e imprescriptibles, regulando como conductas prohibidas:
Artículo 7.3 “La divulgación de hechos relativos a la vida de una persona conocidos a través de la actividad profesional de quien los revela”
Y el artículo 7.7 “La imputación de hechos o la manifestación de juicios de valor a través de acciones o expresiones que de cualquier modo lesionen la dignidad de otra persona, menoscabando su fama, o atentando contra su propia estimación”.
También la L.O. de Protección de Datos de 1999 protege a las personas de la difusión de sus datos de carácter personal, sin su conocimiento, y no discrimina sobre datos positivos o negativos, cualquier dato.
Con el sistema actual de verificación de referencias, se está produciendo un tráfico de datos personales no autorizados que la LOPD califica como delito, por lo que podría suponer la imposición de una condena penal para quien los facilita, si fuese denunciado, o detectado en el curso de una investigación de la Agencia Española de Protección de Datos.
LAS REFERENCIAS SON INJUSTAS:
Las referencias de trabajos anteriores en servicio doméstico son contrarias al más elemental concepto de Justicia, porque con la única base de una opinión, impulsada por quien sabe qué razones, se podría destruir la reputación de una persona, sin que esta pudiera defenderse.
O lo contrario, construir una buena reputación no merecida. Con o sin, la mejor de las intenciones por parte del informador, lo que también es perjudicial, y además muy frecuente, generalmente por hacer un favor, o por salir del paso.
Un informe sobre otra persona, aunque sea favorable incluso aunque sea certero, siempre es intrusivo en la intimidad de la persona sobre la que se emite y, por lo tanto, rechazable.
Se deja el peso de la veracidad de la opinión solo a una de las partes, sin que la otra pueda desmentirlo, o confirmarlo, y poder así contrarrestar lo que se diga de ella.
RECOMENDACIONES A LA HORA DE PEDIR DATOS DE EMPLEADORES ANTERIORES Y DE VERIFICAR SUS REFERENCIAS
- Si se fía de la agencia con la que está tratando, no llame para verificar las referencias. La agencia habrá llamado, las habrá analizado con su experiencia y profesionalidad y le reportará al respecto.
- Si aun así quiere verificarlas usted mismo, tenga en cuenta que la agencia no está autorizada para facilitar datos de los anteriores empleadores de las candidatas. Esos datos se los debe facilitar la propia candidata, habitualmente, al final del proceso de selección, después de la entrevista.
- Tenga en cuenta que el empleador o empleadora que le va a dar referencias de la empleada de hogar tiene sus propios intereses, probablemente una parte en conflicto con los suyos.
- Las referencias de empleada de hogar obtenidas de empleadores anteriores deben ser confrontadas con la empleada de hogar, dándole oportunidad de réplica.
- Para que su nueva empleada de hogar funcione bien en su casa es mucho más importante lo que usted haga al inicio de la relación laboral que lo que pasó en casa de otra familia en el pasado.
Fíese de su instinto y de su agencia…