Cuidar de una persona mayor o familiar en situación de dependencia puede ser muy positivo y gratificante, pero también supone un esfuerzo físico y un desgaste emocional que puede repercutir, a medio y largo plazo, en la salud del cuidador. Por esta razón, las personas que cuidan de mayores dependientes deben aprender a cuidarse y, lo más importante, a no tener sentimientos de culpa por ello.
El porcentaje de mayores de 65 años cada vez es más grande en nuestro país y según estima el IMSERSO, entre el 10-15% presentan una dependencia severa. Por lo general, es la familia la que asume la mayor parte del cuidado de estas personas y suele ser un único miembro el que, sin acuerdo explícito, se encarga de la responsabilidad de los cuidados.
Cómo es el perfil del cuidador de mayores
Mayoritariamente mujer; según el estudio, 8 de cada 10 mujeres de entre 45 y 65 años, en España, están al cuidado algún familiar mayor y arroja estos datos sobre los cuidadores de mayores:
- El 83% son mujeres
- La edad media de la cuidadora es de 52 años
- El 77% está casada
- El 60% vive con la persona a la que cuida
- El 85% presta sus cuidados a diario
- Sólo el 20% recibe ayuda de otros familiares en su tarea de cuidador
- El 17% cuida además a otros familiares, como hijos, maridos, etc.
Ante estas cifras podemos suponer la carga física y emocional que conlleva cuidar de una persona mayor y la importancia de aprender a cuidarse para mantener un estado de salud adecuado que les posibilite poder seguir con los cuidados. De lo contrario, se corre el riesgo de padecer el Síndrome del cuidador quemado. ¿Cuáles son los síntomas?
Síntomas físicos del cuidador de mayores «quemado»
- Cansancio, agotamiento y fatiga.
- Alteración del apetito (aumento o disminución).
- Trastornos del sueño (insomnio, somnolencia, etc.).
- Dolores musculares, palpitaciones, molestias digestivas, cefaleas.
- Abandono de su aspecto físico.
Síntomas emocionales del cuidador de mayores «quemado»
- Tristeza y sentimientos de culpa.
- Irritabilidad
- Dificultad para concentrarse.
Síntomas sociales del cuidador de mayores «quemado»
- Desinterés por actividades que antes disfrutaba.
- Aislamiento familiar y social.
Cómo debe cuidarse el cuidador de mayores
Conociendo estos indicios podemos prevenirlos tomando una serie medidas para cuidarnos y así darnos la energía necesaria para poder cuidar también mejor a nuestros mayores:
- Procura descansar
En ocasiones se debe cuidar al familiar de día y de noche y esto afecta de forma demoledora al cuidador.
Debes asegurarte de que duermes, al menos, siete horas al día ya que la falta de sueño puede traer como consecuencia irritabilidad, torpeza, somnolencia, etc.
- Pide ayuda
No tenemos que enfrentarnos solos a esta situación que nos afecta, tanto a nosotros como a nuestro entorno de forma decisiva. Además, puede ser una situación coyuntural o a largo plazo. Si se necesita descansar podemos pedir ayuda a familiares y amigos e incluso a profesionales que pueden encargarse de darle los cuidados necesarios a la persona mayor por las noches o unas horas al día y de esta forma, aliviar en gran medida la responsabilidad. Las empresas especializadas en proporcionar cuidadores profesionales, pueden asesorarnos y proporcionarnos la persona idónea para que no ayude a cuidar de nuestro familiar mayor.
- No descuides tu alimentación
Tu alimentación es importante para tener una buena salud. Una dieta sana y equilibrada te ayudará a tener energías y hacer frente a todas las tareas.
No te saltes comidas y dedícale el tiempo necesario a cada comida, sentándote a la mesa y comiendo tranquila.
- Haz ejercicio
Debes estar en plena forma si quieres poder cuidar adecuadamente a una persona mayor. Realiza ejercicio para mantener tonificados tus músculos y sobre todo, para minimizar tensiones y estar más relajada.
Pasear 30 minutos diariamente te puede ayudar.
- Cuida tus relaciones
Es importante que tu vida no se centre en el cuidado de la persona mayor, es decir, que tengas otro tipo de relaciones que te ayuden a tener tu propia vida. Dedica parte de tu tiempo a hacer algo que te guste, disfruta con amigos y familiares, etc.
Recuerda que para cuidar bien a un familiar, tú debes estar bien.
Redes de apoyo para cuidadores de mayores y dependientes
CasaLista – Agencia de intermediación laboral especializada en cuidadores profesionales para personas mayores
915 594 177
C/ Cadarso, 3 28008 Madrid
https://casalista.com/
Podemos asesorarles en cómo encontrar un cuidador para sus mayores.
Cruz Roja Española
900 365 100
Línea gratuita de atención a cuidadores no profesionales
(De lunes a viernes –excepto festivos- de 09.00 a 21.00 horas)
Confederación Española de Asociaciones de Familiares de Personas con Alzhéimer y otras demencias (CEAFA)
C/ Pedro Alcatarena, 3 – 31014 Pamplona
948 17 45 17
www.ceafa.es
Federación Española de Párkinson
Paseo de las Delicias, 31
28045 Madrid
91 434 53 71
www.fedesparkinson.org
Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso)
Avenida de la Ilustración, s/n, c/v a C/ Ginzo de Limia, 58
28029 Madrid
901 109 899
www.imserso.es
Confederación Española de Organizaciones de Mayores (CEOMA)
C/ Pío Baroja, 10
28009 Madrid
91 557 25 56
www.ceoma.org
Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados de España (UDP)
C/ Alcalá, 178
28028 Madrid
91 542 02 67
www.mayoresudp.org
Centro de Referencia Estatal de Autonomía Personal y Ayudas Técnicas (CEAPAT)
Calle de los Extremeños, 1
28018 Madrid
91 778 41 17
www.ceapat.org
Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI)
C/ Recoletos, 1
28001 Madrid
91 360 16 78
www.cermi.es
Cáritas Española
Servicios Centrales
C/ Embajadores, 162
28045 Madrid
91 444 10 00
www.caritas.es
Federación Española para la Lucha contra la Esclerosis Múltiple (FELEM)
Calle de Santa Hortensia, 15
28002 Madrid
91 441 01 59
www.esclerosismultiple.com
Fuente de las referencias de cuidadores de mayores y dependientes – Fundación Caser
Para asesoramiento sobre cómo encontrar un cuidador para sus mayores, consulte aquí…