Cuando se busca un cuidador o una residencia para una persona mayor, se valora la atención médico sanitaria, la alimentación, la higiene pero en ocasiones no se le da importancia al ocio. Que las personas mayores dispongan de actividades recreativas es en muchos casos el mejor paliativo.
Llegados a una edad nos vemos liberados de responsabilidades familiares, de compromisos, del trabajo. La jubilación y la emancipación de los hijos conllevan una situación idónea para disponer de tiempo de ocio. Pero, ¿somos realmente conscientes de la importancia del ocio en los mayores?
En cada etapa de la vida hay actividades de ocio adecuadas, aficiones y entretenimientos acordes a nuestras necesidades y gustos que nos ayudan a canalizar el estrés, nos satisfacen y divierten e incluso nos ayudan a liberar endorfinas.
Ser mayor no significa renunciar al ocio, sino que debemos adaptarlo, como en cualquier otra etapa de la vida, para lograr disfrutarlo al máximo.
Si cuidamos de personas mayores o estamos pensando en contratar a un cuidador o que viva en una residencia, es importante tener en cuenta las actividades de ocio que vamos a poner a su disposición y cómo va a poder disfrutar de ellas.
¿Qué actividades se pueden realizar las personas mayores?
Muchos mayores y aquellos que les procuran los cuidados, tienen muchos prejuicios con respecto a la edad. No ven conveniente realizar algunas actividades o tienen miedo de no hacerlo correctamente. Otros, desearían poder ocupar el tiempo pero no saben cómo hacerlo.
Por ello es necesario ofrecerles una serie de actividades acordes a sus gustos, posibilidades y alcance.
Existen multitud de actividades que pueden realizar las personas mayores :
- Sociales: Suelen ser la más gratificantes porque se trata de pasar tiempo con otras personas e interactuar con ellas. Desde pasear con amigos, visitarles, estar con la familia, cuidar de los nietos, pertenecer a alguna peña o asociación, asistir a bailes o fiestas. Las actividades sociales son esenciales.
- Físicas: La actividad física no sólo retrasa el envejecimiento sino que favorece el bienestar físico y mental. Ayuda a liberar las endorfinas, hormonas de la felicidad, y nos hace estar más activos.
Se pueden diseñar programas de ejercicios para adaptarlos a cada una de las personas mayores . Desde acudir al gimnasio para realizar tablas de ejercicios, a pasear, hacer excursiones, nadar, etc.
Actualmente, en muchos parques han habilitado zonas para realizar ejercicios al aire libre que ayudan a las personas mayores (y a los que no son mayores) a ejercitarse.
- Recreativas: Las actividades recreativas son las que divierten y nos proporcionan una satisfacción inmediata. Puede tratarse de pintar, cuidar plantas y jardinería, hacer cerámica, coser, jugar a las cartas, al dominó, etc. Hay multitud de actividades recreativas, simplemente es encontrar las que más apetecen a cada uno.
- Culturales: Ir a conciertos, al teatro, a museos, asistir a conferencias, cursos y seminarios. Dependiendo también de dónde vivamos dispondremos de una agenda cultural, más o menos amplia pero lo importante es estar informado y disfrutar de las propuestas que están a nuestro alcance.
- Viajar: Hay una gran oferta de viajes adaptados para personas mayores. Lugares donde disponen de spa, de accesos para personas con movilidad reducida, con servicios sanitarios cercanos, etc.
- Prestar algún servicio de voluntariado. Ser mayor no es sinónimo de recibir ayuda, sino también de ofrecerla. Muchas asociaciones y organizaciones encuentran en los mayores una gran ayuda para llevar a cabo sus fines.
La Comunidad de Madrid ofrece información al respecto en su web.
Beneficios del ocio en personas mayores
- Mejora la autoestima: al sentirse integrados, útiles y ociosos mejoramos la seguridad en ellos mismos.
- Favorece la integración: Las diferentes actividades proporcionan a la persona mayor interactuar con diferentes grupos y conocer gente nueva. Aumenta la comunicación e interacción con otras personas.
- Potencia la autonomía: la seguridad en uno mismo mejora la salud mental y física así como la independencia personal.
- Mayor satisfacción: al aumentar la calidad de vida se está más contento y feliz y eso redunda en todas las facetas de la vida.
El ocio es imprescindible en nuestra vida. Es muy importante incentivar y motivar al mayor, ofrecerle diferentes alternativas y que sea él quien elija las que más y mejor se adecuan a sus posibilidades, gustos y personalidad.