Cuando a un ser querido le diagnostica demencia, nos encontramos ante una situación que no nos habíamos planteado y que nos cuesta comprender. Muchas personas mayores sufren demencia y para poder cuidarles eficazmente es necesario que exista una comunicación efectiva y afectiva.
Te ofrecemos unas pautas que pueden ayudarte ante esta nueva situación de cuidar de una persona con demencia.
Lo primero que debemos saber acerca de la demencia es que no es una enfermedad, sino un desorden progresivo de las funciones intelectuales superiores como la memoria, el lenguaje y otras actividades cognitivas. Se trata de una variedad de síntomas relacionados con un deterioro de la capacidad mental, un deterioro importante y grave que interfiere en la capacidad de realizar actividades de la vida diaria del paciente.
Cuando a una persona se le diagnostica demencia es porque da claras señales de deficiencias en la memoria, en el lenguaje y en el razonamiento. Las características principales son:
- Problemas para recodar episodios recientes (pérdida de memoria)
- Dificultad para realizar tareas habituales
- Confusión, alteraciones del comportamiento y del carácter
- Limitación en el lenguaje, para completar el pensamiento o seguir instrucciones
El Alzheimer es el tipo de demencia más conocido y común ya que representa entre el 60-80% de los casos. No obstante, existen otras muchas otras causas que pueden provocar la demencia como los accidentes cerebrovasculares o los problemas de tiroides, la falta de ciertas vitaminas, etc.
Cuidar de personas mayores con demencia requiere, entre otros aspecto, de establecer una comunicación efectiva y constante con ellas. Aunque comunicarse con una persona con demencia pueda resultar en ocasiones una tarea difícil y frustrante, existen una serie de estrategias de comunicación a las que podemos recurrir y que nos ayudarán:
- Evita las distracciones. Cuando te dirijas a ella intenta que esté concentrado, que haya el menor ruido posible en la habitación; apaga el volumen de la televisión o la radio, cierra las ventanas si la calle es poco silenciosa, etc. Ten en cuenta que las habilidades para concentrarse son menores y debemos eliminar las distracciones para que preste atención a lo que estamos diciendo.
- Identifícate. Recuérdale, a lo largo de la conversación, quién eres y si notas que no te reconoce, no te enfades y dale tiempo, no insistas ya que puedes provocarle ansiedad.
- Utiliza frases cortas y sencillas. Y por supuesto, un tono amable y tranquilo ya que si además de no entenderte, nota tu enfado será muy estresante para la persona con demencia.
- Realiza preguntas cerradas. Es decir, que la respuesta pueda ser sí o no. De esta forma le será más sencillo procesar tanto la pregunta como la respuesta. Y si es necesario, divide la pregunta en partes más pequeñas.
- Usa un tono tranquilo y amable. Evita hablarles a gritos, no son sordos sólo han olvidado algunos significados de ciertas palabras, no les trates como si fueran niños, no seas condescendiente, son adultos pero se sienten confusos y por supuesto no hables como si no estuvieran, mírales a los ojos, a su altura y utiliza un tono directo y cariñoso.
- Mantén la calma. Si la persona no te reconoce, si está confundida o enfadada, no discutas. Recuerda que no se siente bien y está aturdida y no recuerda.
- Dale tiempo para responder. Es importante que le des tiempo para que procese pregunta y respuesta. Y no debes interrumpirle ni terminar sus frases.
- Habla en positivo. Trata de dar directrices evitando las negaciones es mejor decirle, “Espera aquí un momento” a “No te muevas de aquí”.
Consejosda la hora de tratar conuna persona con demencia
- Cuídale como te gustaría que te cuidaran a ti.
- Intenta ponerte en su lugar porque además, puede que algún día lo estés realmente.
- Recurre a los médicos y enfermeros sanitarios que te aconsejarán y ayudarán en esta difícil tarea.
- Estudia la posibilidad de recibir ayuda externa de profesionales en el cuidado de personas mayores con los que podrás compartir las diferentes tareas y el cuidado de la persona mayor con demencia.
Recuerda que las personas mayores con demencia pueden sentirse frustrados con la situación que viven. Tú puedes ayudarles a sentirse mejor, tratándoles con respeto y cariño.